En esta oportunidad, en el marco de una recorrida por establecimientos educativos abiertos en el verano, dos odontólogas visitaron a los alumnos del Jardín de Infantes Nº 911 del barrio Las Quintas, en Santa Teresita. “Más allá de la revisión, con este programa los chicos además aprenden a cuidarse. La prevención es un trabajo que no se termina nunca. Es muy importante una buena higiene bucal y tomar el hábito de asistir una vez al año a un odontólogo”, explicó el director de Gestión en Salud, Cristian Rossi.
“Las profesionales que detectan una necesidad urgente con posible pérdida de una pieza dentaria inmediatamente derivan al niño a un hospital público para su atención”, agregó Rossi.
El programa municipal Mi Sonrisa Infinita fue implementado en 2008 por el intendente Juan Pablo de Jesús. Desde entonces se han revisado más de 4.000 niños y fueron atendidas unas 600 patologías bucales en niños en edad escolar.
El objetivo del programa es la prevención de la salud bucal. Para ello se hace foco en la enseñanza del cepillado, hábitos higiénicos, de alimentación y además, la topicación con flúor para evitar las caries.