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El 5 de mayo se conmemora el Día Internacional de la Celiaquía, y en esta fecha se busca concientizar a la población, brindar información sobre la enfermedad y acompañar a quienes la padecen.
Es una enfermedad crónica producida por una intolerancia permanente al gluten, que es una proteína que se encuentra en algunos cereales (Trigo, Avena, Cebada y Centeno: TACC).
Afecta la mucosa del intestino delgado de personas que tienen una predisposición genética. En ellas la ingesta de gluten produce un efecto mediado por el sistema inmunológico, con diferentes manifestaciones clínicas.
Puede presentarse en cualquier momento de la vida de las personas y es una enfermedad que afecta a 1 de cada 100 personas de la población general del país.
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
El diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad es importante para reducir síntomas y daños en tiempo presente y complicaciones a mediano y largo plazo. Esas complicaciones pueden ser talla baja, osteoporosis, tumores intestinales, problemas ginecológicos, entre otras.
Actualmente es muy conocido el hecho de que esta intolerancia al gluten y sus consecuencias pueden expresarse en la vida adulta, con manifestaciones intestinales u otras como cansancio, depresión, caída del cabello, menarca tardía, pérdida de embarazos, menopausia precoz, anemia, entre otras muchas formas de presentación.
El diagnóstico se realiza con tres elementos que son la clínica (examen físico y antecedentes), el laboratorio (análisis de sangre) y la biopsia de intestino.
El tratamiento consiste en la dieta libre de gluten de por vida y el seguimiento anual con el equipo de salud.
ALIMENTOS PERMITIDOS
Según el Código Alimentario Argentino (CAA) un Alimento Libre de Gluten (ALG) es aquel que está preparado únicamente con ingredientes que por su origen natural y por la aplicación de buenas prácticas de elaboración -que impidan la contaminación cruzada- no contiene gluten.
Si bien hay una gran cantidad de alimentos que por su composición son “libres de gluten” (sin TACC), estos pueden contaminarse durante el proceso de industrialización, en cualquiera de sus etapas, a través de superficies, aire, equipos, entre otros.
Es recomendable que se consuman únicamente aquellos alimentos industrializados que estén autorizados como libres de gluten (sin TACC) e incluidos en el Listado Integrado de Alimentos Libres de Gluten publicado por la ANMAT.
Tan importante como la elección de alimentos es su manipulación, almacenamiento, preparación, servido y guardado posterior.
Un alimento que no contiene gluten puede contaminarse por estar en contacto con otros alimentos que lo contengan o bien, por utilizarse los mismos utensilios para cocinar o manipular unos y otros, sin higienizar correctamente. Eso se llama contaminación cruzada.
